jueves, 22 de abril de 2021

2. Edén

¿Acaso fui yo la que te indujo al pecado? ¿A sacarte de aquel paraíso? ¿A caer en lo más profundo y llenar el resto de tu vida de sufrimiento? ¿Fuiste obligado, amenazado?

Pudiste haber aprendido de mí: Caí en la tentación y vi la oscuridad; desapareció ese sedoso velo de los ojos. Pero ahora, tengo sed inmensa de empezar el camino de regreso hacia la luz.

Puedes seguir culpándome y lamentándote, o podemos seguir navegando juntos, ver crecer los árboles, pintar de verde todo alrededor y disfrutar de esa riqueza que nuestras manos cosecharon.

¡Quiero sembrar contigo en la tierra el paraíso!






No hay comentarios:

Publicar un comentario